Las residencias van desde los 1,000 metros cuadrados de construcción hasta los 2,800 metros cuadrados, y se caracterizan por su diseño exclusivo y atención al detalle. Las residencias cuentan con vistas impresionantes a la selva maya y los jardines del hotel, así como acceso a todas las amenidades de la propiedad, incluyendo el galardonado spa, el restaurante de alta cocina y los jardines botánicos.